Capítulo 19.

*Soñando*

-Buenas noche princesa...

-Hola Justin...

-Te voy a encontrar...

-Nunca...

-Lo haré...

-Te esperaré...

(Claudia)

Cuando me levanté vi que Jorsh estaba dormido.

Me levanté con cuidado y fui a la ducha.

Estaba cantando cuando escuché la puerta del cuarto de baño abrirse.

-Jorsh ¿eres tu?- pregunté.

-No hay nadie mas en la casa que tu y yo- dijo -tranquila solo vengo a lavarme la cara- dijo.

-Vale- dije.

Seguí cantando hasta que escuché la puerta cerrarse. Cogí la toalla desde dentro y me la lié en el cuerpo. Cuando salí vi una nota en el espejo. La cogí y la leí.

Te espero en el salón.

Salí del baño con la toalla por el cuerpo y llegué a mi cuarto. Mi puse esta ropa:

Y cuando fui a coger la barra de labios vi otra nota. Llévate una gafas de sol.

Sonreí y busqué mis gafas de sol nuevas.

Salí del cuarto y por el pasillo me encontré un plato con una magdalena rosa.

La cogí y le di un bocado, estaba muy rica.

Puse el plato sobre la mesa y cuando entré al saló vi a Jorsh sentado en el sofá con una enorme tarta. Se acordó de que hoy era mi cumpleaños.

Sonreí y fui corriendo a abrazarlo.

Nos lo pasamos bien en el desayuno. El cantó la canción de cumpleaños desafinando en todos los tonos posibles pero me gustó el detalle. Me regaló un anillo precioso el que juré no quitarme en la vida. Lo adoraba era tan perfecto...

-¿Y para que son las gafas de sol? -pregunté.

-Sorpresa número dos- dijo sonriente.

Me vendó los ojos y con su ayuda nos montamos en el taxi.

Estaba insegura pero sabía que a su lado no me pasaba nada.

Nos bajamos en algún lugar que todavía no conocía.

-Ahora puedes mirar.

Me quitó el pañuelo y vi el lugar que más deseaba en el mundo entero.

El teatro de danza e interpretación mas importante de Andalucía, solo para nosotros.

Una lágrima calló de mi ojo y Jorsh me abrazó.

-Tengo contactos- dijo.

Le abracé muy fuerte y corrí al escenario. Vi como colocaba una cámara delante de el para grabar.

-¿Y eso?- pregunté.

-Necesitaremos pruebas de tu magnifico potencial en el baile, para enseñárselo a nuestros hijos ¿no?- dijo sonriente.

Me reí y acepté con la cabeza.

Una música comenzó a sonar muy fuerte y Jorsh y yo empezamos a bailar a su ritmo.

Las caídas, las risas, los besos, los bailes, las miradas, las burlas, las batallas...

Quedaron grabada en aquella cinta que no volví a ver hasta la noche.

(Justin)

Me desperté temprano para recuperar el tiempo perdido del día anterior.

Corrí como una bala hacía el teatro para la despedida del tour en New York.

Era esa misma noche y pasado mañana viajaba a España.

Estuve casi tres horas seguidas repitiendo una canción y otra.

-Muy bien Justin, descansa- dijeron mis jefes.

Cogí las cosas y me fui a casa a descansar.

Esa chica cada día me tenía mas intrigado. Si existiera ¿que pasaría? Me la llevaría para siempre, no podría vivir sin la chica de mis sueños.

Bajé las escaleras de mi casa corriendo. Comí algo rápido y me encaminé de nuevo al teatro donde se celebraría el concierto. Las chicas de vestuario me cogieron rápidamente y me metieron en el provador.

Un traje bastante impresionante se posó sobre mi cuerpo como una pluma.

Después me llevaron a maquillaje y me peinaron.

Hicimos un último ensayo con los bailarines y canté con Nicky Minaj.

Entré al camerino y bebí un poco de agua.

-Justin tienes que salir ya- dijo mi madre mientras me daba palmaditas en la espalda.

Me giré y le sonreí.

Nos fuimos juntos hasta la parte trasera del escenario donde estaban todos mis compañeros en círculo. Rezamos y después me dijeron el orden de las canciones.