lunes, 12 de noviembre de 2012

Capítulo 26.


Vi a lo lejos como Jorsh se acercaba. Fui corriendo hacia el y le besé.
-Rápido tenemos que buscar a Clara- dije.
Me cogió de la mano y empezamos a correr hacia la discoteca.
La gente estaba saliendo a montones y no veíamos nada.
Encendí mi movil y llamé al de Clara. Comunicaba.
-¡Mierda!- dije poniéndome la mano en la cabeza.
Jorsh me miró preocupado y seguimos buscando.
Preguntamos a la gente y todos negaban.
-A ver donde coño está la niñata esta- dije enfadada.
Jorsh empezó a ponerse nervioso y se le ocurrió una idea.
-Ven- me agarró del brazo y tiró de mi.
Corrimos cuesta abajo por una calle muy estrecha. Después salimos a una avenida y corrimos hasta un portal.
Jorsh miró de un lado a otro y ando rápido hacia un bulto detrás de una papelera.
-¡Lo sabía!- dijo Jorsh tirándose de los pelos.
Miré y allí estaba Clara, helada de frío y con un golpe en el ojo.
-¡Clara!- grité asustada.
Ella levantó un poco la cabeza y derramó una lágrima.
Me agaché y le abracé contra mi para darle calor.
Jorsh se quitó su chaqueta y se la puso por encima. Le ayudé a levantarse y la llevé a casa de mis primos.
En el camino no paraba de llorar, no se le entendía nada.
Anduvimos largo rato por su lentitud pero llegamos a tiempo para que no se desmayase.
Subimos bastante rápido y entramos corriendo a la casa.
Todos dormían excepto mi prima que se estaba vistiendo para ir al instituto.
Al ver a Clara se asustó bastante pero después de explicárselo se calmó y nos ayudó a llevarla a la ducha.
Mientras mi prima preparaba leche con miel para calentar su garganta, Jorsh preparaba la cama y cogía uno de mis pijamas.
Yo ayudaba a Clara a ducharse para calmarla un poco y después la llevé a mi cuarto para que se vistiera.
Cuando estaba vistiéndose mi prima entró con el baso de leche y lo puso sobre la mesita. Trajo unas mantas y unas manoplas empapadas para aliviar el golpe.
-Aquí os traigo algunas cosillas, espero que te pongas mejor Clara- dijo mi prima sonriendo.
-Adeu- dijo en catalán.
Le despedimos y seguí cuidando a Clara.
Cuando terminó de vestirse entró Jorsh y me ayudó a tumbarla.
La tapamos y le puse las manoplas mojadas en el ojo dañado.
Le dejamos descansar y salimos del cuarto.
Mis padres habían pasado la noche en un hotel para celebrar su aniversario y no llegarían hasta mañana.
Nos sentamos en el sofá y creo que me quedé dormida durante unos minutos porque no me acuerdo de nada.
-Claudia, cariño- escuché a lo lejos.
Abría poco a poco los ojos y vi la mano de Jorsh moverse de un lado a otro.
Me enseñó el reloj y vi que marcaba la una y ellos salían a las cuatro de la tarde y Clara todavía seguía acostada.
Me levanté de un salto. Todavía llevaba la ropa de la noche anterior.
Fui a la habitación donde Clara había pasado la noche. Allí estaba dormida y roncando como un cerdo.
Me empecé a reír y Jorsh al igual.
Le desperté despacito y la ayudé a levantarse.
-Ahora necesitamos la explicación de tus heridas- dije seria.
Nos miró aterrada y empezó a hablar.
-No fue aquel chico Claudia- dijo triste.
Le miré y aun me sorprendí mas.
-Salí de la discoteca de su mano, me prometió llevarme a un lugar precioso.
Subimos a una especie de montaña y su movil empezó a sonar.
Tenía novia Claudia...- dijo mientras derramaba una lágrima.
Le abracé y ella siguió hablando.
-Me dijo que se tenía que ir que su novia le iba a matar. Me dijo que era una chica encantadora pero que se había descontrolado.
Me llevó hasta la puerta del hotel y para no entrar llorando me quedé en la puerta- paró y respiró.
-Vi que un grupo de chicas se acercaban a mi y empezaban a reírse. Me levanté para entrar en el hotel cuando una de las chicas me escupió. Me di la vuelta y le arreé un guantazo y la empujé. Todas las amigas empezaron a empujarme y una de ellas me dio un puñetazo en el ojo. Perdí el conocimiento y solo escuchaba voces. Por ejemplo Tía la has matado, eras una perra hija de puta, olvídate de ser mas nuestra amiga...
-Cuando me desperté estaba con ustedes- dijo algo triste.

Capítulo 25.


-¿Gilipollas? ¿Por que?- dijo asustado.
-¿Me estás vacilando Jorsh?-dije muy enfadada.
-No... Yo no se que te he echo- dijo.
-Ja ¿Que no lo sabes?- dije en en plan irónico.
-No... Joder Claudia ¿que coño te pasa?- dijo.
-¡Que te has besado con otra tía en la discoteca cabrón- dije enfadada.
-¿Que dices?- dijo preocupado.
-Lo que oyes, o es que como estabas tan bebido no te acuerdas- dije otra vez irónicamente.
Un silencio eterno se apoderó del movil.
-Mira Claudia si he bebido pero yo no estaba besando a nadie. Desde que te fuiste a buscar a Clara me quedé solo. Y por cierto tu amiga está en casa del chico ese por si te interesaba doña lista- dijo mosqueado.
Ahora que empezaba a recordar.

·Antes de entrar en la discoteca·
-¡Mira ese niño se parece a ti Jorsh!

-Jorsh... Siento haberte hablado así. Vi a ese chico parecido a ti besando a esa chica y...- me arrepentía mil de lo que había pasado pero gracias a esa equivocación había conocido a Justin.
Recordé que Jorsh me había dicho que Clara se había ido con el catalán aquel.
-No pasa nada princesita- dijo Jorsh.
Sonreí.
-Por favor ayudame a buscar a Clara- dije preocupada.
-Claro que te ayudaré. Estoy en la casa de tus primos en 5 minutos- dijo.
Esta noche iba a ser muy larga. Eran las seis de la mañana y yo todavía no había pegado ojo.
Me puse algo rápido:


Y bajé corriendo al portal.

Capítulo 24.


(Justin)
Verla allí tan sola, tan hermosa... Se me hizo el corazón añicos.
Le di un beso en la mejilla.
-Toma la dirección de mi hotel y un pase para subir a la habitación y devolverme mi gorra. Recuerda que tienes que ir sola- dije sonriendo.
Ella me devolvió la sonrisa e hizo como el gesto de querer darme un abrazo pero se frenó.
-¿Puedo?- preguntó con los ojos aún negros de haber llorado.
-Claro- dije sonriendo.
Se acercó y me abrazó. Sentí su colonia penetrando en mi nariz de una manera tan especial. Esa sensación de tenerla en mis brazos... Y saber que me iba a durar tan poco.
Nos quedamos abrazados una eternidad, ojala nunca se soltara.
Levantó su cabeza y me miró.
-Mi novio a besado a otra chica en la discoteca- dijo mientras una lágrima caía de sus pequeños ojitos verdes.
Le miré sorprendido y le volví a abrazar.
-No llores Claudia- me alegraba de poderla llamar por fin por su nombre.
Ella se separó y se secó las lágrimas.
-Lo siento- dijo con la cabeza agachada.
-¿Por qué? Eres la chica de mis sueños que vas a sentir- dije levantandole la barbilla.
-Es que no lo entiendo ahora debería estar en plan ¡Justin Bieber! ¡Justin Bieber! Y estoy deprimida por ese idiota- dijo con los brazos cruzados.
-Eso es porque ya tenemos confianza. ¿Recuerdas nuestros sueños?- pregunté sonriente.
-Claro- dijo ella por igual.
-Pues piensa que ya me has encontrado, que el sueño es real, que estamos juntos, como amigos- dije sonriendo.
Ella sonrió y después me dio un beso en la mejilla.
-Yo ahora me tengo que ir Claudia, pero sabes donde estoy y si necesitas algo solo tienes que buscarme- dije sonriendo.
Le dí un beso en la frente y me alejé de aquel callejón.
(Claudia)
Después de ese reencuentro con Justin todo había cambiado. Lo conocía me había dado confianzas. Era todo perfecto excepto por el idiota de Jorsh.
Cuando Justin se despidió de mi me fui a casa de mis primos. Cuando llegué mi madre ya estaba mas que dormida.
Entré en el baño y me volví a dar una ducha. Me desmaquillé y a continuación me puse un pijamita calentito.
Me metí en la cama y cerré los ojos.
De repente mi movil sonó e inmediatamente me levanté a cogerlo para que no hiciese ruido.
-¿Si?- pregunté.
-Cariño ¿donde estás? Llevo buscándote media hora- dijo Jorsh desde la otra línea.
-¡¿Que donde estoy?! Pues en mi casa gilipollas- dije casi gritando.

sábado, 3 de noviembre de 2012

Capítulo 23.


(Justin)
En el avión todo parecía de color de rosa.
Mi madre me hablaba con total normalidad. Mi música se escuchaba de fondo y yo podía estar tranquilo ya que Selena me había perdonado.
Aterrizamos y salí escoltado por mis guardaespaldas.
Mi equipaje fue recogido por un grupo de personas y yo sin llevar nada encima salí al exterior.
Miles de fans se agolpaban en la puerta como si regalasen dinero y en ese mismo instante escuché mi canción de fondo.
Miré a mis guardaespaldas y les dije que quería ver lo que era eso.
Abrieron paso entre la multitud y vi a un grupo de jóvenes bailando.
En el suelo estaba una chica de pelo marrón claro con la cabeza agachada.
Ese pelo...(Me sonaba) Pensé que estaban interpretando el videoclip.
La chica se levantó y empezó a bailar. Se me quedó mirando y me sonrió.
No lo podía creer, era ella... La tenía tan cerca pero a la vez tan lejos.
Me aparté de mis guardaespaldas y me acerqué a ver el baile.
Pusieron vallas a mi alrededor y las fans se quedaron atrás mía.
La vi bailar. Coordinaba sus movimientos como si su vida dependiera de ello.
Era preciosa. Se acercó a mi y me cogió la gorra. Las chicas de atrás mía empezaron a gritar. Le sonreí, ella me devolvió la sonrisa y empezó a imitar los mismos pasos de baile que en el videoclip.
El baile terminó y ella me guiñó un ojo. Me dio un papel y se alejó con mi gorra.
Lo abrí y leía lo que ponía.

Si quieres tu gorra debes encontrarme ;)
(Claudia)
Se dirigía a nosotros con su sonrisa pícara y perfecta.
Se quedó mirándome como si mi cara le sonara de algo.
Un cosquilleo empezó a correrme por el cuerpo como mil mariposas revoloteando en el estómago.
La música empezó a sonar e intenté dar todo en el baile.
Su mirada se fundía con la mía. Nos miramos y nos sonreímos.
Me acerqué a el y le cogí la gorra (cosa que ya tenía pensada).
El me sonrió y yo seguí bailando.
Cuando el baile acabó le guiñé un ojo y le di un papel.
Sus guardaespaldas lo escoltaron de nuevo y se lo llevaron al interior de la limusina.

Cuando terminamos de recoger llevé a Jorsh a una cafetería cercana.
El me quitó la gorra y se la colocó.
-A mi me queda mejor que a el... Admítelo- dijo sonriendo.
Me empecé a reír y se la arrebaté.
Pensé en Justin toda la tarde. ¿Me buscaría de verdad?
Todavía tenía su gorra... El tenía que recuperarla.
Llegué a casa y todos dormían. Me duché y me preparé para salir a la discoteca.
Ya tenía edad para entrar en una light.
Me alisé el pelo y me puse esto:
Jorsh me esperaba en la puerta con un taxi.
Salí y le di un beso en los labios.
La discoteca estaba cerca. Empezó a llover y caminamos rápido hacia dentro.
La música a tope, humo, bebidas.
Me asusté un poco pero después comprendí la situación y me adapté.
Jorsh empezó a bailar con migo y me hizo sentirme especial. Bailamos muy sensualmente y pegados. Me encantaba sentirlo así de cerca.
Lo amaba. Clara bailaba pegado a un chico catalán que conoció en la disco.
Vi que en sus manos sostenía un tubo de Bozca. Me prometió que no iba a beber.
Jorsh también bebió y se le subieron los humos. Empezó a besarme el cuello y a tocarme el culo.
-Jorsh estás bebido, para ya- dije.
-Ven cariño, hazme tuyo- dijo pasando sus manos por la cintura.
Le empujé y me fui a donde estaba Clara.
Vi como besaba al chico de la discoteca. Me acerqué y los separé.
-¡Que haces tía!- dijo empujándome.
-Clara has bebido- dije seria.
-¿Y? - dijo mientras volvía a los labios del chico.
No quería estar allí. Cogí mis cosas del vestuario y fui a buscar a Jorsh.
Una lágrima cayó de mi mejilla. No lo podía creer, el chico de mi vida, mi niño, mi novio... Besando a una gilipollas de la discoteca.
Un chico me tocó el culo y salí de allí corriendo, no quería saber nada.
Cuando estaba en la calle intenté pedir un taxi pero estaban ocupados.
Estaba rendida. No podía mas. Al verlo allí besando a esa guarra...
Me eché a llorar y todo se me hizo eterno. De repente una mano tiró de mi.
Levanté la vista y vi a un chico vestido de negro.
-¡Suéltame! ¡Ayuda!- empecé a gritar.
El me metió en un callejón y me pegó con la pared. Me puso el dedo en los labios y sin dejarme hablar se quitó la capucha que llevaba.
Mis ojos se abrieron como platos. No podía ser verdad... El, estaba a mi lado, el chico de mis sueños me había secuestrado.
Me sonrió y me devolvió la nota que le di esa misma mañana.
-¿Y mi gorra?- dijo sonriendo.
No sabía que decir, estaba asustada. Estaba frente a Justin Bieber y el me trataba tan normal.
-¿Eres la chica de mis sueños?- me preguntó acercándose a mis labios.
Le miré atentamente y le sonreí.
-¿Por que letra empieza mi nombre?- le pregunté.
El agachó la cabeza y emitió una sonrisilla graciosa.
Se acercó a mi oído y me retiró el pelo de la cara.
-C- dijo satisfecho.
No me lo podía creer. Todo estos sueños, esas sonrisas, esas palabras...
Nuestros sueños estaban compartidos.
Le miré sorprendida y le sonreí.
-Si, eres tú- dijo el sonriendo.
-Esto no puede ser verdad- dije sentándome en el suelo aún mojado por la lluvia.
El se sentó a mi lado y me agarró la mano.
-Yo tampoco lo entiendo... Nuestros sueños estaban comunicados, es de locos- dijo sonriendo.
Le miré y el a mí.
-Me llamo Claudia- dije sonriendo.
El se sorprendió, miró al cielo y se rió.
-Mi hermana me dijo que te llamabas así- dijo el sonriendo.
-¿De verdad?- dije sorprendida.
Afirmó con la cabeza y me abrazó.
Cuando nos despegamos me guiñó un ojo y me besó la mejilla.

Capítulo 22.


(Justin)
-¡Vamos Justin! Duchate, vístete, arreglate...
-Voy mama, voy...
Me desperté con constancia y me preparé para el viaje.
-Salimos a las 12:30 de la noche cariño- dijo Pattie.
-Joder que tarde mama...
-Lose hijo, lose-dijo.
Tanto movimiento de arriba abajo para una salida tan tarde.
Fuimos a ayudar al equipo con las cosas. Vestuario, maquillaje, decorado etc.
Tardamos un par de hora en montar todo en el autobús y después tocaba descansar.
Mamá me llevo a casa para despedirme de Selena a solas.
Preparé la comida favorita de Selena. Tallarines. Después me senté a esperar.
Pasaron unos tres minutos y llamaron al timbre.
Abrí y Selena me besó los labios. Abrí los ojos y me retiré. ¿Que me pasa? Yo quería a Selena...
Me miró extraña y pasó al salón. Aun sin mirarme me habló.
-¿Que te pasa? Hace una semana que no se nada de ti.
-Ya lo se muñeca, pero con el concierto y el viaje no he tenido tiempo- dije.
Ella asintió y aun sin mirarme se sentó en el sofá.
Me acerqué a ella y puse el plato de comida. Levantó un poco la vista y sonrió.
-Ya he comido- dijo sonriendo.
Me alejé y la miré atentamente. ¿que le pasaba?
-He comido con tu madre ¿tampoco te habías enterado?- preguntó ahora un poco mas seria.
Me quedé de piedra. ¿Que pasaba? ¿Que me pasaba?
Me alejé y me senté en la otra parte del salón. Tanto pensar en la chica de España me volvía loco.
Vi como Selena cogía las cosas y se iba. Valla despedida de mierda.
Yo loco, mi novia enfadada y mi madre... A saber como se pondría cuando se enterase.
-Justin Bieber Malette ¡sabes cuanto lloraba Selena! Estas tonto.
Las palabras se me quedaron grabadas en la cabeza como las letras de mis canciones.
No paré de pensar en lo sucedido. No podía dormir haber para que coño tuve que portarme así con Selena. No contestaba ni a mis llamadas.
Decidí desconectar y me dormí un poco antes del viaje.
(Claudia)
Me desperté temprano y acompañé a mi prima al instituto.
Fuimos andando ya que estaba cerca. Faltaban unos diez minutos para que empezaran sus clases así que decidimos quedarnos fuera un rato.
Me presentó a sus amigas y amigos.
-Hola guapa- dijo uno de los chicos.
-Hola- dije tímida.
Me sonrió.
-¿Tienes novio?- preguntó. Joder que le acababa de conocer.
-Si- dije sonriendo.
-Nos vemos- dijo alejándose.



Me empecé a reír con mi prima y el se quedó callado.
Sonó el timbre del instituto y ella se fue corriendo. Decidí dar un paseo y así poder comprarme la ropa para la llegada de Justin.
Mis compañeros de baile ya habían llegado y tenía que ir a buscarlos para la llegada de Justin a Barcelona.
Cogí un autobús hasta el aeropuerto y cuando llegué allí estaban todos preparándose para el baile.
Nada más bajar vi a Jorsh a lo lejos. Corrí hacia el todo lo posible y cuando llegué me lancé a sus brazos.
Empezó a reírse y me besó. Después salude a Clara y a todos los demás.
Me fui detrás de un coche a cambiarme y me puse esto:
Cuando llegué ya estaba todo montado. Un pequeño escenario en relación con el videoclip de As long as you love me y altavoces al rededor.
Estábamos estirando cuando escuchamos los gritos de miles de fans que se apelotonaban en la entrada.
Me empecé a poner nerviosa. Las manos y las piernas me temblaban. El, mi ídolo, el chico de mis sueños... Estaba tan cerca, pero a la vez tan lejos.
Lucía dio la señal y As long as you love me empezó a sonar por todo el lugar.