Capítulo 33.

(Justin)

Me senté en la mesa enfrente de ella. Ahora iba a ser yo el difícil.

Empecé a hablar con su padre de música y noté como ella observaba.

Cada vez que yo la miraba ella bajaba la mirada.

El camarero llegó y tomó apuntes de nuestra comida.

Ella se pidió una ensalada mixta y yo una chuleta, tenía bastante hambre.

Cuando estábamos a punto de terminar le sonó el movil.

Miró la llamada y sonrió.

-Ahora vuelvo tengo que contestar, perdón- dijo mientras se levantaba y descolgaba el movil.

Observé como salía al exterior.

-Voy al baño, disculpad- dije mientras me ponía de pié y salía tras Claudia.

Vi como se alejaba a la orilla de la playa, donde ya no había nadie. Era tarde.

Escuchaba la risa de nuestros padres en el interior.

Me acerqué a ella sigilosamente.

-Si Jorsh estoy bien, de verdad- dijo ella.

Ese debería ser su novio, maldito gilipollas.

Vi como colgaba y se sentaba en la arena.

Me acerqué un poco mas y me senté junto a ella.

-Se que has estado escuchando, lo siento- dijo ella.

-No pasa nada- dije sonriendo.

-Pero tu tienes a Selena Justin- dijo mirándome.

-Pero no es lo mismo, yo no quiero a Selena Claudia, estoy con ella por la fama. Por que si no estás con un famoso te vas a pique- dije triste.

Ella me miró y se acercó.

-Ahora tu eres el que me lo pones difícil- dijo ella sonriendo.

Miré hacia atrás, no había nadie. Eran las tres, seguro que sus padres y mi madre estaban ya borrachos.

Me levanté y se me ocurrió una idea.

-Mira ven- dije agarrándola por las manos y levantándola.

Ella se levantó y se quitó los zapatos.

Corrimos a la orilla y la metí un poco en el agua sus pies y los fueron absorbidos por el mar. El agua nos llegaba a los tobillos, no estaba fría, mas bien caliente.

Ella me miró y sonrió.

-¿Es precioso verdad?-dijo mirando a la luna.

-Si- dije yo pasando mis manos por su cintura, ella intervino agarrándolas.

Miramos al frente, la luna estaba llena era todo tan perfecto.

-Justin- dijo ella.

-¿Si?- dije yo.

-Te quiero- dijo sonriendo.

Me solté de ella y la aguante la cara.

Me acerqué poco a poco a sus labios, muy lentamente.

Noté como se ponía nerviosa.

-Besame- dijo.

Me acerqué definitivamente y la besé, lentamente. Nuestros labios encajaban perfectamente.

Mordí su labio inferior ella sonrió.

-Y yo- dije sonriendo.

Me acerqué a su oído.

-Súbete a caballito- dije.

Ella se alejó y empezó a reírse.

Se montó encima de mi espalda y le di un paseo por la playa.

Ella se reía con migo y yo con ella. Fue una noche inolvidable.

Cuando nos cansamos fuimos de nuevo al restaurante y vimos como nuestros padres ya salían.

-Al baño ¿no?- dijo Pattie.

-Hemos dado una vuelta por la playa- dije sonriendo.

-Bueno vamos que es muy tarde y mañana tienes ensayo temprano- dijo Pattie.

-Adiós preciosa- dijo Pattie sonriendo.

-Adiós Pattie, mañana nos vemos- dijo sonriendo.

Me acerqué y le di dos besos para disimular. Le susurré al oído te quiero y ella sonrió.