(Durante
la ausencia de Claudia)
-Claro,
¿a que hora es?- preguntó Jorsh.
-A
las siete, no faltes en- dijo esta sonriendo.
A
Jorsh se le pasó el tiempo volando y por fin llegó la fiesta.
Entró
a casa de Clara, muchos bailarines, pero ninguno conocido, ponche,
bebidas y confeti por todos lados. Buscó con la mirada a Clara pero
no la encontró.
De
repente alguien subió a su espalda y se rió.
-¡Has
venido!-dijo Clara sonriendo.
-Si
aquí estoy- dijo.
Tras
hablar durante largas horas empezaron con las canciones lentas.
Y
Jorsh y Clara no se les ocurrió otra cosa que bailar juntos.
-¿Bailamos?-
dijo Clara.
-Vamos-dijo
Jorsh.
Los
dos juntos de la mano salieron a la pista de baile (el salón de la
casa) y empezaron a mover sus cuerpos lentamente mientras sonaba una
de esas baladas tan bonitas de Alicia Keys. Clara miraba los ojos de
Jorsh. Era un chico guapísimo y encantador, le había gustado
siempre pero era el novio de su mejor amiga y no podía hacer nada.
Pero tenerlo hay delante era irresistible a sus tentaciones. Jorsh se
acercó suavemente a su mejilla y después subió a su oído.
Le
susurró algo que mas tarde pasó a ser un pequeño gesto de asombro.
Clara
le sonrió pícaramente y depositó sus blanditos labios en los de
aquel chico.
(Claudia)
Miré
el movil y más tarde la carta ¿que hacía?
Buscó
en la lista de contactos por la J y apareció Jorsh.
Pulsó
para llamar. Unos cuantos pitidos y por fin descolgó su movil.
-Hola
¿quien es?- se escuchó la voz de una chica.
-Soy
Clara ¿y tu?- dijo la voz de su “supuesta” mejor amiga tras el
movil. ¿Desde cuando Jorsh y Clara eran tan amigos como para
contestar?
-Soy
una amiga de Jorsh- mentí -solo quería saber como os iba- dije para
saber si habían echo algo juntos.
-Pues
muy bien, cuando vea a Claudia le dirá que se ha enamorado de otra
chica y cuando pase un tiempo y Claudia se olvide de el le diremos
que estamos juntos- por un momento me quedé paralizada con el movil
aún pegado a la oreja y de fondo esa frase repitiéndose una y otra
vez en mi interior. Solo quería morirme, pero me lo merecía, yo
había echo lo mismo.
-¿Hola?
¿Hay alguien?- se escuchaba en la otra línea.
Miré
el movil y colgué sin decir nada.
(Justin)
Me
desperté temprano lo raro es que esa noche no había soñado con
Claudia. ¿Y si ahora que la había conocido no volvería a soñar
con ella? ¿Y si ya el mundo no me diera mas oportunidades y no la
volviese a ver mas? Muchas preguntas resonaban en mi cabeza, no podía
parar de pensar en ella, su sonrisa, su pelo, todo.
Me
levanté y encendí el movil, me sorprendí bastante al ver que mis
seguidores no paraban de seguir unos tras otros y mas. Sonó un
pequeño ¡TIC! Anunciándome que tenía un mensaje directo. Lo abrí
y para mas sorpresa vi que era de ClaudiaBelieberForEver, aquel
nombre me hizo reír muchísimo.
Lo
abrí y leí.
Hola
Justin he llegado muy bien, aunque ya te echo de menos. No se como
hacer para no estar a tu lado en estos días. Espero verte pronto, te
quiere mucho. La chica de tus sueño.
Parecía
que se había pasado y los caracteres no daban a mas.
Sonreí
pero a la vez noté una sensación de tristeza y una ridícula pero
atrevida idea.
Todavía
tenía dos semanas mas de vacaciones y con que otra persona podría
aprovecharlas sino. Se que mi madre no me dejaría pero tenía que
conseguirlo.
Mi
avión a Madrid salía a las ocho de la tarde pero quizás un cambio
de destino no vendría mal.
Mi
madre aún dormía y tenía tiempo a preparar las cosas.
Cogí
toda la ropa que pude y la metí en la maleta. Zapatos y un neceser
con cosas en otra maleta mas pequeña. Fui al baño y corriendo me
bañé.
Era
una locura pero tenía que verla, pasar tiempo a su lado y sobre todo
no volverla a perder.
Me
salí del baño me sequé veloz y me vestí. Lo peor de todo esto era
que no me reconocieran.
Llamé
a uno de mis mejores amigos, Kenny Hamilton que por supuesto me
ayudó.
No hay comentarios:
Publicar un comentario